¿Quién es Patrizia Gaell y cuáles son sus sueños? Patrizia Gaell es una persona con una imaginación desbordante y una sensibilidad extrema. Es una mujer que sobrevive a la locura de un mundo que a veces no comprende y que casi nunca entiende. Un mundo que contempla con los ojos, los oídos y la razón pero al que jamás conseguirá adaptarse, por eso pienso que ha desarrollado la destreza de crear mundos de papel. En ellos moldea a su antojo todo aquello que en el mundo real se escapa a su comprensión y entendimiento, consiguiendo esa adaptación que en la vida real es incapaz de alcanzar. ¿Cuáles son sus sueños, pregunta? Ilusiones las llamaría yo, y de esas tiene un sin fin. ¿Sueños? Hace mucho tiempo que ha dejado de tenerlos.

Entrevista a Patrizia Gaell, escritora

¿Ha cumplido alguno de ellos? Sí. Soy afortunada por haber podido experimentar esa sensación de logro alguna vez en mi vida, cuando todavía me permitía la inocencia de creer en ellos.

¿Desde qué momento surge la idea de escribir un libro? Tenía bosquejos de algo rondando en  mi cabeza. Poco a poco esos esbozos fueron cogiendo forma hasta convertirse en una historia realmente fascinante. Entonces surgió la necesidad de contarla, y con esa necesidad la idea de escribir un libro.

¿Ihalma es el primero que ha publicado? Es el primero llevado a edición. Sí.

¿Por qué ese título? Soy gallega de nacimiento y mi abuela solía hablar de “a ialma da xente” el alma de la gente. Siempre me ha parecido una palabra hermosa, mágica, cargada de enigmas y con mucho poder. Por eso cuando comencé a escribir esta novela, consideré  perfecta es palabra para bautizar la historia que acababa de nacer.

La escena se publica entre A Coruña y Berlín, guarda especial cariño a ambas ciudades, ¿tuvo claro que la escena iba a dedicarse en ambas ciudades? Desde el principio y sin duda. Son dos lugares que siempre me han llenado de vida, que siempre me han aportado paz, seguridad y lo que comúnmente se denomina felicidad. El desarrollar la historia relacionando ambas ciudades ha sido mi humilde manera de rendirles un pequeño tributo por todo lo que me han aportado.

Al leer su novela, además de extraer el contenido de ficción he detectado un trasfondo relacionado con las emociones…. ¿guardan especial importancia para usted? Supongo que sí. En la novela se tocan diferentes maneras de sentir y sentimientos que la mayoría de las veces resultan difíciles de reconocer o admitir que se sienten. Lo digo porque no solemos hablar de ese tipo de emociones tan profundas y reales con nadie, a veces ni con nosotros mismos. Tal vez porque ni siquiera sepamos cómo hacerlo. Se sienten, se tienen pero no se comprenden, y si se consiguen comprender nos da pudor hablar de ello, por tanto se reprimen generando así, la mayoría de las veces,  nuestro propio infierno. Es algo que les ocurre a los protagonistas de esta historia. Se debe poder hablar de todo aquello que sentimos sin temor a la respuesta que podamos obtener, pues la peor de las respuestas siempre será no hablar de ello.

¿Qué es lo que ha deseado transmitir con su novela en cuanto a lo que llega al lector? El reconocimiento del tiempo limitado del que disponemos. La toma de consciencia de que se debe aprovechar ese tiempo, pues tal vez no puedan conseguirse segundas oportunidades para hacer aquello que uno pretende hacer. El emplear el tiempo en aquello que realmente nos haga sentir la vida, la dicha de poseerla mientras la tenemos. El eliminar ese pensamiento de: “ya lo haré mañana” porque tal vez mañana sea demasiado tarde.  El aprender a apreciar realmente a las personas que nos acompañan en este viaje llamado vida, de una manera tan altruista y maravillosa. El no dar por sentado absolutamente nada, ni a nadie. El cuidar a tu gente, tu tiempo y tu vida. Y como comentábamos hace un instante, el poder compartir con esa gente todas las experiencias vivida, sean buenas, regulares o malas.

¿De qué manera ha construido a sus personajes? Tengo una forma muy particular de hacerlo. Creo que ya lo he comentado en alguna ocasión. Antes de escribir la primera palabra del boceto inicial, de lo que algún día será una historia, abro expedientes con los nombres de los personajes que van a formar parte de esa historia. En esos expedientes comienzan a entrar todo tipo de datos: Biografías completas; con fotografías, localizaciones, perfiles físicos, psicológicos y sociales de cada uno de ellos, documentación de investigación,…etc. Con la apertura de esas carpetas nacen cada una de las personas que van a formar parte en el futuro,  de ese mundo ficticio creado especialmente para ellos.

 ¿Es cierto lo que me comentan otros escritores, que los personajes les hablan? Yo no diría que me hablan, sino más bien que  me entrometo en sus vidas de manera descarada y sin permiso. Les espío a conciencia ¿sabe? Es como si existiese ese mundo en otra dimensión distinta a la nuestra. Vas de visita allí, te cuelas en su mundo, ves lo que ocurre, les escuchas, les observas y cuando regresas al mundo real, lo escribes absolutamente todo.

Siempre me gusta quedarme con los detalles al leer las novelas de los escritores, y en esta se puede apreciar gusto por la música, el arte…etc, el autor deja impronta en su novela. Nada más allá de mi intención, créame. No ha sido premeditado. Pero como sabrá, cada uno de los personajes que un autor crea siempre lleva consigo un pedacito de aquel que les ha dado vida, bien sea en cuestión de carácter, criterios, gustos, formas de expresión u otra característica cualquiera.

¿La historia que nos cuenta en la novela tiene parte de historia real? En toda historia escrita siempre hay algo de realidad, a veces fácilmente detectable otras veces no. En este caso la parte real está ligada al descubrimiento repentino que hace el  personaje principal a cerca de la fragilidad de la vida humana y del tiempo que disponemos para vivirla. Fue para mí toda una lección de vida, créame, el descubrir realmente algo que todos sabemos pero que nos cuesta demasiado admitir que es así, y es la fragilidad de nuestro tiempo. Vivimos tan deprisa que la mayoría de las cosas buenas de la vida pasan por nuestro lado y no nos damos cuenta hasta que es demasiado tarde como para disfrutar de ellas.

Me ha parecido una forma muy curiosa de tratar el tema de la muerte y del paso del más allá a través de la fantasía, ¿qué es lo que deseaba transmitir? Escuché decir una vez que los latidos del corazón son el sonido de un reloj contando el tiempo hacia la muerte, pues estos comienzan con la vida. La muerte es algo tan natural como la vida en sí, forma parte de nosotros y de nuestro tiempo en este mundo. Su peculiaridad es que ante ella todos somos iguales, eso es lo único que todos nosotros tenemos en común. Nuestro encuentro con ella. Sea más tarde o más temprano, esta llegará a nosotros y no podremos hacer nada para evitarlo. Es una realidad que debemos tratar como tal, sin temor ni resquemor. ¿Lo que hay después de que esta llegue? No se nos está permitido saberlo, por eso ahí la imaginación  y el pensamiento es libre.

Lo más bonito de su novela, es la importancia que le da a la amistad y el paso del tiempo, ¿son valores importantes para usted? Mucho. Considero la amistad como uno de los valores más importantes de la vida, pues tras ella llegan cosas tan imprescindibles y necesarias como el amor, el respeto, o la compañía. Es un bien tan preciado como escaso,  y el que tiene la suerte de poseerlo, debe trabajar muy duro en ello para poder conservarlo.

También se habla de los ángeles y de los demonios…., así como del don de la telepatía y de la curiosidad por las descripciones en el que consigues imaginarte la escena con sus explicaciones…. Es cierto que se habla de todo ello desde la ficción, pero podría trasladarse al mundo real como sentimientos que en algún momento se adueñan de nosotros. La esperanza, el amor, la amistad, estarían ocultos tras los ángeles. El miedo, la frustración, la desesperación o la pena que a veces sentimos, se ocultarían tras los demonios, y la conciencia ó esa vocecilla que todos tenemos dentro que nos dicta qué hacer cuando tenemos dudas, se la podríamos atribuir a la telepatía de aquellos personajes de la poseen.

¿Quería dejar plasmada en la novela parte de la historia de Berlín? así como la importancia de otros temas sociales que se extraen de la novela. Era necesario, no solo porque la ciudad es en sí un personaje más, sino que  era fundamental para poder ubicar temporalmente la llegada de cada uno de los personajes secundarios de la segunda parte de la novela,  y dar con ello así una explicación a su existencia. En cuanto a la importancia de los diversos temas sociales que se apuntan en el desarrollo de la novela, era de obligado cumplimiento integrarlos en ella, que formasen parte de ella. Ihalma es una novela que intenta abarcar todo tipo de temas reflexivos, emocionales y sociales. No me he parado a pensar en ningún momento cuales podrían ser válidos o cuales no, pues considero que lo importante es poder hablar de ellos sin temor, sin tapujos y sin preocupaciones, pero siempre con respeto y honestidad.

Importancia también al papel de las bibliotecas, que en esta novela, la ubica en un lugar considerado. ¿Cómo no concederle importancia en una novela de fantasía y magia al lugar más mágico y fantástico que pueda existir en este mundo. Ese lugar en el que cada vez que entras descubres algo nuevo. Esa habitación en la que dispones de todo lo que quieras y necesitas, en la que te está permitido todo lo que puedas imaginarte y más. Cualquier cosa está disponible en una biblioteca: una buena tarde, una aventura, un refugio, un respiro para el estrés. Todo, absolutamente todo se encuentra allá donde se guardan los libros.

He extraído también de la novela su gusto por la poesía, ¿ha escrito algo?¿o tiene pensado hacerlo? He intentado escribir poesía, lo confieso. De hecho tengo muchísimos cuadernos escritos intentando crear algo que se le parezca, pero no lo he logrado. Aún así, como amante eterna de ella, sigo tratando de desarrollar la habilidad que me permita  poder hacerlo algún día.

Y también se habla del despertar del alma y la conciencia racional, extrayéndolo entre líneas. Me imagino que se refiere a esa lucha dual entre lo sentimental y lo racional. Tal vez me equivoque pero pienso que es una lucha que todos libramos en algún momento de nuestra vida. Algunos de forma consciente y otros lo hacen, o lo harán de manera inconsciente. Ese momento en el que nos hemos perdido, y una parte de nosotros tira hacia la derecha y la otra hacia la izquierda, resultando ser muy difícil tomar la decisión más acertada o la mejor para resolver aquello que nos atormenta. Es en ese momento cuando se vuelve imprescindible escuchar a aquellos que están a tu lado, pues ellos son los que te ayudarán a tomar la mejor de las opciones. Ellos se volverán tu razón, y sus palabras subsanarán tu martirizada alma.

¿Piensa seguir escribiendo? Pienso en volver a intentarlo.

¿Ya está en proyecto? Hay algo nuevo, sí. Pinceladas de brocha gorda, trozos aquí y allí que van cogiendo forma de historia, pero todavía estoy descubriendo la vida de esos nuevos personajes, conociéndolos, acechándolos, espiándolos, y tomando notas.

¿Cuánto tiempo le llevó escribir Ihalma? Esta última versión podría decirse que año y medio. Pero antes de esta, ha habido muchas otras; bocetos y más bocetos de los que iba rescatando fragmentos hasta construir la historia inicial que comencé a escribir en Noviembre de 2017.

¿Y la documentación? En investigación,  localizaciones, desarrollo de personajes, fotografías, y demás documentación, tardaría sobre cuatro años. En total con los bocetos y todo lo necesario hasta comenzar lo que se ha llevado a edición, “Ihalma” ha tardado en nacer aproximadamente seis o siete años.

Algo que añadir… Pues que los lectores se animen a leerla, no porque constar aquí, sino porque descubrirán una historia realmente fascinante, fácil de leer, intrigante, entretenida, reflexiva y sorpresiva. Una novela que les hará vivir una experiencia maravillosa. Estoy segura de ello.

Por último, darles las gracias a ustedes por el interés mostrado hacia mí y hacia mi trabajo, por su amabilidad y buen hacer. Gracias.

 

 

 

Entrevista a Patrizia Gaell, escritora
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Editado en Alicante por Eva María Galán Sempere
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