Reseña sobre el cuento El chubasquero de Aurora de María Márquez

Llega a mis manos, recomendado por mi amigo valenciano David Salvador, el cuento El chubasquero de Aurora. Un libro que trata sobre un tema muy necesario para hacer consciente a la sociedad, que habla sobre la violencia de género.

Es un tema controvertido que he de decir que me resulta chocante que se exponga a un público infantil, pero, sin embargo, creo que es totalmente necesario para que los niños no vean como “normales” ciertos comportamientos y crezcan siendo unos niños sanos. También en su vida repetirán patrones que hayan visto en su casa, en ambientes familiares, etc. y es importante que también estos libros vayan destinados para ellos para que aprendan otras cosas.

He de decir que lo que me he visto y leído ha sido una preciosidad, es un cuento ilustrado. Pero sí puedo deciros que es un cuento que acaba bien, con final feliz. Dos personajes nos encontramos en este cuento en el que las primeras emociones que nos encontramos son el miedo de la niña y el coraje de su madre.

Nada más empezar a leer el cuento encontramos una dedicatoria por parte de la autora, a todas las mujeres de su vida y también es Paco Ortega el ilustrador quien dedica unas palabras a todas las Auroras valientes.

En cuanto a la edad recomendada para leer este libro, no me gusta poner una edad concreta, ya que lo mismo lo pueden leer los niños de 4 años que los adultos de 80. Yo sería un libro que recomendaría para cualquier edad.

La trama

Aurora es una niña pequeña. Su padre es un ogro, y la niña siempre está asustada.  Su habitación es su refugio y un gatito le acompaña. Tras oír los gritos del monstruo, la niña se duerme recordando las canciones de su abuela Cuca.

Su madre le regala un chubasquero blanco, bonito, suave y brillante para que cuando llueva se proteja y la lluvia le resbale al igual que el miedo que tiene en su corazón.

Es muy bonito como simboliza María Márquez las emociones de la niña con los botones del chubasquero, según la situación por la que esté pasando la niña, los botones se vuelven de un color u otro.

Emociones y colores en el cuento

 Cuando la niña está triste, los botones se vuelven grises y cuando siente miedo, los botones se vuelven negros.

También se simboliza en los ojos azules de su madre que no puede ver hasta casi el final del cuento, como el color de la esperanza y de la libertad del cielo.

O el color violeta para representar la igualdad, el coraje y la libertad.

¿Cuál es el mensaje final de este cuento?

Con lo que nos tenemos que quedar de este cuento, es que por mucho que se quiera a una persona y por mucho que digan que te quieran, si te grita, si te molesta, si te hace sentir mal. No es una persona recomendada para ti, y es más si es una persona considerada como un maltratador nunca será un buen padre.

Que hay que ser fuertes y valientes. Llenarse de valentía y pedir ayuda, como también proteger a los menores. Porque no estáis solas, no tenéis porqué aguantar y porque la sociedad debe ayudaros.

Porque cuando salgáis de ese infierno podréis mirar al cielo sin las gafas de sol, y volver a ser vosotras.

Mención especial al ilustrador

Me gustaría ahora detenerme en las ilustraciones del magnífico Paco Ortega. Unas ilustraciones que reflejan espléndidamente las conmociones de la niña, sus emociones y cómo se siente.

Son trazos sencillos, pero que dicen mucho en el cuento. Muy acertada la elección. ¡Mi más sincera Enhorabuena!

Guía didáctica

Al final del cuento podemos encontrar una guía didáctica elaborada por Carmen Pimienta Vállez en el que se observan actividades para todas las edades.

Es una guía didáctica orientada para trabajar la colaboración y el trabajo cooperativo, así como la igualdad, la tolerancia y la diversidad. Y para potenciar la Educación sobre la igualdad y la Educación emocional y afectiva.

También nos encontramos una propuesta de actividades por edades que va de los 4 a los 18 años.

Es un libro muy práctico para utilizarlo en los colegios ya que podéis utilizar ese material complementario para su uso.

Publicado por

Ediciones Bellatera

Tapa dura. 48 páginas

Ilustraciones por Paco Ortega