La sorpresa llega a mis manos de un autor barcelonés llamado Pablo Martín Tharrats que sin ser historiador ni experto en el tema nos adentra en un acontecimiento olvidado para la historia de España y que lo relata en forma de novela llamado El motín de San Jerónimo publicado bajo el sello Bubok. Pero también os tengo que decir que este título no va en solitario porque lo continúa otro llamado Los 27 amotinados de San Jerónimo.

Primero os voy a hablar del libro El motín de San Jerónimo y luego os hablaré del otro en posterior reseña. También tengo que decir que el libro me ha atrapado desde el principio (a pesar de que no soy muy apasionada de la lectura histórica) y que en pocos días me lo había terminado de leer.

El motín de San Jerónimo al igual que Los 27 amotinados de San Jerónimo van dedicados a su familia, pero sí que es verdad que el primero agradece al autor de un cuadro que es el que utilizó para la portada de su libro. ¡Muy acertado por cierto! Ambas portadas son maravillosas.

El libro comienza con una presentación en la que el autor nos ubica en espacio-tiempo. Una fecha 1566 y Colón en el Nuevo Mundo bajo el reinado de Felipe II. El autor nos relata la trama a través de la pluma del soldado Juan Martínez escrito el 25 de julio de 1567 aunque también añade algo de su pluma lo que hace que la lectura sea muy entretenida y rápida de leer. El autor afirma que todo ocurrió tal cual sucede en la novela y así dar visibilidad por ser una historia olvidada en la historia de España.

Llegamos al prefacio en el que el autor comparte un escrito de un fragmento literal de Juan Martínez. Tengo que resaltar que cada uno de los capítulos va precedido de un título acompañado en ocasiones con una fecha, y como llamada de atención, de vez en cuando vamos a encontrar notas aclaratorias del autor así como fragmentos de la trama original, por lo que podréis observar la calidad y exquisitez del texto muy bien documentado. También números entre paréntesis que son notas aclaratorias que podemos encontrar en las últimas páginas del libro.

Desde el capítulo I la historia está presente en la Real Audiencia de Méjico en 1566. El primer personaje que nos presenta el autor es Francisco de Ceinos, oidor y quien forma la Real Audiencia. Del Galeón San Jerónimo se nos habla desde el principio, y podría añadir que se os va a dar la sensación en su lectura que es un personaje más. El capitán Pedro Sánchez Pericón es el responsable del Galeón, acompañado de su hijo y de los soldados a quienes ofrece dinero por la travesía a Legazpi.

Hay un personaje que va a hacerlo pasar mal en la novela a todo el que se acerque a él, es Lope Martín, un mozo de almacén que busca el interés propio, es mentiroso y traidor. A él se le encomienda buscar la tripulación debido a la premura por la partida y no va a ser del todo acertado. El autor nos relata muy bien la reflotación de la tripulación y en el que personajes como Rodrigo de Ataguren, Alberto de Orozco, Ortiz Mosquera o Felipe del Campo aparecen en escena. Se debe buscar una tripulación que sea fiel a la Corona de España.

Una vez recogida la tripulación deben tomar expedición a México dirección Acapulco. Ahora el autor nos hace una diferencia entre Pablo Martin y Juan Martínez, y conocemos las diferencias de ambos a bordo de la nao San Jerónimo. Y como no podía ser de otra manera en la travesía atraviesan una tormenta ya al principio de la novela que hace que ya te mantengas alerta en la lectura en todo momento.

Como comentaba anteriormente Lope es un personaje problemático y a bordo va a malmeter entre la tripulación, el destino es Legazpi pero él sabe que si llega allí va a ser ajusticiado, por lo que va a hacer todo lo posible por cambiar el rumbo de la historia y que propone al capitán de la nao. Él sube al barco con unas condiciones pero en la travesía las amenazas y la deslealtad van a estar a la orden y la vida en barco va a ser dura.

Fray Juan de Vivero es un religioso que les acompaña en la navegación y que desde el principio vamos a ver para qué lado se posiciona. Durante la travesía se van a suceder momentos muy tensos como el que ocurre cuando hay escándalos por el agua y el alimento a bordo. Hay una revuelta ya que el caballo está bebiendo más que los marineros. Santiago Garnica está al lado del capitán y va a informarlo de todas las traiciones que es capaz de cometer Lope.

También se siente a través de la lectura las preocupaciones de la tripulación y de lo que va a ser de ellos. Ahora el rumbo es otro y se les promete promesas que van a ser cumplidas o no. Los objetivos son diferentes para la tripulación del barco y va a pasar que se hagan como dos bandos, pero debido a las malas condiciones de la navegación hay gente que vamos a ir perdiendo.

Ortiz es de los primeros que no se fía de las intenciones de Lope ya que lo ve venir y van a tramar un plan para acabar con él aunque él se da cuenta. Tras una charla entre ellos se esclarece la verdad y son ajusticiados con grilletes. Es Felipe del Campo quien acusa a Ortiz Mosquera y repudia calumnias y juicio hacia él.

En la lectura se denota mucha tensión en el barco ya que un solo bando domina la nave. El religioso Fray va a ser el punto de apoyo para muchos y en quien se refugien en más de una ocasión. La primera vez que divisan tierra es a través de Pablo Martin pero no van a ir hacia ella. Necesitan con urgencia encontrar otra isla donde haya agua y comida por la necesidad de la tripulación.

Es momento de aparición de los indios que se unen a la tripulación y es ordenada a subir a cubierta. El capitán debe escoger los marineros que se quedan en tierra y los que no, pero la isla está llena de dificultades también. Fray es el más comprensivo en cuanto hacen aparición los indios ya que afirma que “somos un alma y un solo corazón”. De la mano del autor conocemos las tradiciones y costumbres de los indios así como su vestimenta. De nuevo Lope con la subida de los indios a bordo tiene un plan.

San Jerónimo sigue el viaje en dirección a la isla de los ladrones que es un cercado de islas. Lope tiene que hacer maniobras en el barco, pero es dañado y tienen que repararlo. Son los indios precisamente quienes les van a suministrar de comida y agua y es Fray quien tiene una fuerte discusión con Lope.

Ahora ya hay dos bandos, los que están a favor de Lope y los que están a favor de Pablo. La organización en el barco es muy mala y la temperatura tampoco favorece. Juan de Requena es el encargado de las armas que cuenta con el apoyo de más hombres, pero es momento de confiar en Santiago Garnica y Rodrigo del Angle para apoderarse del San Jerónimo y aumentar el grupo.

El autor nos muestra de forma magistral el nerviosismo entre los tripulantes ahora divididos en dos bandos y en el no saber cuál es su sino. Es momento de conocer al parao de la isla y en el que el autor se toma la licencia de dar su opinión en la novela. Otro personaje se adentra en la escena para tomar el control, es J. Enrique Flamenco.

Imagino que el autor al documentarse ha encontrado dificultades a la hora de datar la cronología de la novela porque hay momentos de aclaración con respecto a ello y de las diferencias que hay. Los de la playa se han revuelto y han organizado un motín y Lope los toma como traidores que van armados y en contra de él. Sabemos también que Juan de Zaldívar es el escribano de la nao.

Ahora los enfrentados en dos bandos van a ser Felipe del Campo y Lope Martin, quien el primero le envía una carta aunque sospechan que es una trampa. Ambos son traidores y ambos no son de fiar por lo que hay que elegir a un nuevo capitán del barco y deben volver a la isla a coger mas enseres y necesidades para ellos.

El capítulo más corto y que me ha llamado la atención es el numero veintidós, de una sola hoja. En el que se sucede que el batel vuelve a la isla a recuperar espadas y arcabuces. Necesitan munición para la guerra que se avecina.

Ahora es Rodrigo quien les da la espalda a Pablo Martín y Bartolomé de Lara. Hay algunos de los tripulantes que prefieren quedarse en la isla y ellos piensan que deben salvarlos porque son españoles y han sido 27 marineros abandonados entre mozos y soldados, en este momento conocemos los nombres de todos que el autor nos los facilita.  De nuevo dos notas del autor interrumpen para hablarnos sobre las idas y venidas del batel a la playa. Es Rodrigo quien gana el mando y se enfrenta a Lope y a Felipe, aunque tiene a más gente acusada.

Es momento de llegar a otra isla en la que tienen que suministrarse ya que hay víveres y de nuevo notas aclaratorias del autor sobre las fechas e ubicaciones. De los indios conocemos muchas curiosidades, así como el mal de San Lorenzo con la lepra, pero Fray de nuevo les echa una mano y es el único que los entiende y en quien también se apoya Rodrigo junto con Juan Martínez. Y de nuevo, llega la tormenta con quien no cuentan con ella.

A partir de ahora son todas emociones fuertes porque nos vamos acercando al final, y en el que no todo es como lo parece. Los fuertes atacan a los débiles y hay que contar también con el factor sorpresa. Tras cinco meses y medio llegan al puerto de Cebú y el autor nos relata cómo fueron recibidos por el Gobernador y los percances que tuvieron en la expedición.

El autor nos indica en el capítulo cuarenta que hasta aquí llega el relato de Juan Martínez de 1566.  A partir de ahora son todo aclaraciones por parte del autor, en el que nos da información sobre la isla que fondeó San Jerónimo y nos adelanta la propuesta de don Miguel Félix Chinchón Rodríguez sobre los acontecimientos. También conocemos los cálculos para determinar que atolón fondeó el San Jerónimo.

Finalmente conocemos las curiosidades que escribió Juan Martínez, a quién fue dirigido, y sabemos que él no nombró apenas el galeón. Él nos relata en las condiciones en el que estaba el galeón, el color de piel de Lope, los cañones del San Jerónimo y cuando llega el barco a la isla de Cebú. También nos relata sobre la tripulación embarcada en el San Jerónimo por orden alfabético y las diferencias por el amigo Lope o los 27 amotinados en isla que no continúan el viaje. Lo que da pie a la lectura de la siguiente novela Los 27 amotinados del San Jerónimo escrita por el mismo autor.

El autor acaba con información adicional y bibliografía con textos originales, así como fuentes y bibliografía. Algo que me ha llamado mucho la atención es que el autor comparte con el lector la cronología sobre el escrito El motín de San Jerónimo, el tiempo que le llevó escribirlo, las revisiones, etc. y conocemos otros libros del autor. ¡Mi más sincera enhorabuena al autor por tan magnífica obra!

 

 

 

Reseña del libro El motín de San Jerónimo de Pablo Martín Tharrats
Comparte en:

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

En calidad de Afiliado de Amazon, obtengo ingresos por las compras adscritas que cumplen los requisitos aplicables.
Editado en Alicante por Eva María Galán Sempere
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos y para fines de afiliación y para mostrarte publicidad relacionada con sus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos.
Privacidad
Una mirada al mundo de las bibliotecas